Apartamentos y Alojamiento con Niños en Ámsterdam

Cuando se viaja con niños, no cabe duda de que alquilar un apartamento es la mejor idea: será lo más económico, podrás cocinar su comida favorita cuando estén hartos de probar platos nuevos y extraños y tendrán su propia habitación para estar a sus anchas. Casi cualquier rincón del centro de Ámsterdam es ideal para alojarse con niños: les embelesarán los canales y puentes al lado de casa y les gustará no caminar demasiado para hacer turismo, porque las distancias son cortas. Una buena zona son las inmediaciones de la estación central, ya que es un lugar estratégico para ir de un lado para otro con la mayor facilidad. Los niños más culturales disfrutarán de la estancia en el barrio de los museos, que podrán visitar todo el tiempo que necesiten sin estar lejos de casa. En todo caso, quizás convenga evitar el barrio rojo, para no encontrarse en situaciones incómodas ni tener que dar demasiadas explicaciones. Por otra parte, conviene fijarse en qué zonas tienen supermercado, para que todo el proceso de preparar comidas resulte más fácil.

Con los pases de 24, 48 o 72 horas de I Amsterdam, toda la familia podrá disfrutar de infinidad de museos (como el aventurero Museo Nacional Marítimo o el colorido Museo Van Gogh), además de transporte en autobús, metro y tranvía, por un buen precio. Esta es una buena opción para hacer turismo y poder entrar y salir a los sitios según se sientan los más pequeños. Los adolescentes podrán aprender sobre alguien de su edad que vivió la cara más agria de la ciudad, gracias a las visitas guiadas por el Ámsterdam de Anna Frank. El parque más famoso de la ciudad, Vondelpark, es un magnífico lugar para pasar una mañana o una tarde (o incluso un día entero) con los niños, hacer un picnic y, en verano, refrescarse en su piscina. Una visita muy especial es la fábrica de diamantes, donde conocerán los secretos de una de las industrias más importantes en la historia del país. Otro lugar que les encantará es Artis, uno de los zoos más antiguos de Europa, que cuenta además con preciosos jardines.

En el famoso Vondelpark hay varios cafés y restaurantes donde no cabrá el aburrimiento infantil. Mientras que al lado de Melkhuis, que tiene terraza en verano, hay una zona de columpios, en el Kinderkookcafé podrán jugar cocinando mientras los adultos descansan tomando algo. A los niños de cualquier edad les encantará comer pizza a bordo de un barco que surque los canales de Ámsterdam: Canal Pizza Cruise ofrece noventa minutos de diversión, bebidas ilimitadas y pizza sobre las aguas. Los más golosos disfrutarán de Pancakes, especializado en las tortitas más internacionales y, por supuesto, las más típicas de Holanda. Una buena idea también es ir a catas de comida, como quesos o chocolate, para disfrutar de las delicias gastronómicas locales. En la zona de Scheldestraat hay tiendas y restaurantes para niños. Les encantará el italiano Feduzzi y el desayuno o la merienda de @7. Además, hay muchos puestos con comida rápida, como con las típicas vlaamse frites o patatas fritas, que los niños siempre disfrutan. Si se atreven, que las prueben con salsas como crema de cacahuete.

Con un paisaje urbano bellísimo, la capital holandesa es maravillosa para recorrerla a pie, aunque los niños se suelen cansar de caminar. Afortunadamente, el transporte en Ámsterdam es muy variado y entretenido. Mientras que hay un buen sistema de metro, los autobuses y tranvías son una opción excelente para ver la ciudad sin tener que andar demasiado. Una de las grandes ventajas de la tarjeta turística I Amsterdam es que el transporte está incluido de manera ilimitada durante el período de validez. Además, la infinidad de canales que recorren la ciudad también ofrece la posibilidad de trasladarse de un lado para otro en barco, algo que a los niños les encantará. Hay que aprovechar el día que estén más enérgicos, para alquilar unas bicis, sin lugar a dudas, el transporte más típico de Ámsterdam. Los coches están más que acostumbrados a conducir con infinidad de bicis alrededor, con lo que es bastante seguro. También puede ser divertido alquilar el típico bakfiet, un tipo de bici con una especie de cesta grande para transportar mercancías o personas pequeñitas.