Ibiza es un paraíso mediterráneo de sobra conocido por turistas de todo el mundo. Sin embargo, y sobre todo de cara al extranjero, la isla goza de mayor reputación a causa de sus clubes y fiestas varias que por el conjunto de sus playas de ensueño. Lo cierto es que la conocida por muchos como isla ‘mágica’ ofrece al visitante tanto espectaculares calas como pueblos con encanto, convirtiéndose en una de esas opciones vacacionales difícilmente comparables a otros destinos.
A continuación hacemos un repaso a 10 enclaves e hitos ibicencos cuya visita es casi obligada:
- Islote de Es Vedrà
Pocas visiones de Ibiza impresionan más que este peñón, el cual se eleva, de forma casi vertical, 400 metros por encima del nivel del mar. Hay, entre los lugareños, quien le atribuye un aura y unos poderes casi mágicos, y cuenta incluso con una fauna bastante rica, entre lagartos de pequeño tamaño y diferentes especies de aves marinas.Vista de Es Vedrà desde la costa ibicenca. Fotografía de Margolum Smargol
- Cueva de Can Marçà
A pesar de no haberse convertido en atracción turística hasta los años 80, la Cueva de Can Marçà cuenta con, ni más ni menos que 100.000 años de antigüedad. En su día constituyó un importante refugio de contrabandistas de la zona y en la actualidad se accede a ella a través de un espectacular acantilado sobre la costa, por lo que ofrece unas espectaculares vistas. - Mágicas puestas de sol
Las puestas de sol ibicencas son todo un clásico para los veraneantes de la isla. Y es que no hay mejor momento para degustar un buen cocktail que mientras se disfruta de semejante espectáculo visual. Son varios los enclaves desde los que contemplar el atardecer aunque las playas de Punta Galera y Sant Antoni de Portmany merecen una mención especial.Atardecer ibicenco entre yates. Fotografía de Tetsuya Yamamoto
- Dalt Vila
Dalt Vila es el nombre que recibe el antiguo recinto amurallado del centro de la ciudad. Preparado desde sus orígenes para proteger a la villa de los asaltos de piratas y otros invasores, la muralla y sus diferentes puertas de acceso continúan en pie en nuestros días; murallas que fueron, por cierto, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1999. - Mercadillo Hippy de Las Dalias
Las Dalias acoge cada sábado (de 10:00 de la mañana a 20:00 de la tarde) su famoso mercadillo hippie, en el que llegan a darse cita miles de personas en un sólo día. Este mercado puede ser el lugar ideal para hacernos con prendas de ropa, bisutería y demás productos de artesanía tan característicos de las Islas Baleares. Una vez llega la hora del cierre es el momento de salir por los diferentes bares y restaurantes de la zona hasta altas horas de la noche.Entrada al mercadillo de Las Dalias. Fotografía de Ronald Saunders
- Pinturas rupestres de Ses Fontanelles
Seguramente no mucha gente imagina que Ibiza cuenta con sus propias pinturas rupestres, concretamente en la zona de Ses Fontanelles, en una cueva conocida como Sa Cova des Vi. Entrando por un acantilado puede accederse a esta gruta, en cuyo interior nos esperan unos garabatos de entre los siglos IV y VI a.C. y que fueron descubiertos por un religioso en 1917. - Santa Gertrudis
Santa Gertrudis es uno los pueblos con más encanto de la isla de Ibiza. No se encuentra en el litoral sino hacia el interior y es un núcleo urbano bastante pequeño pero que cuenta con algunos bares y restaurantes y cuya vida social siempre ha girado en torno a su famosa ermita del siglo XVIII.Fachada iluminada de la ermita de Santa Gertrudis. Foto de PeacockArmageddon
- Practicar snorkel
Al igual que ocurre en el resto de las islas de archipiélago balear, en Ibiza las aguas suelen ser cristalinas. Si nos desplazamos hasta la Cala Xarraca encontraremos un pequeño reducto de incomparable belleza que es, además, uno de los mejores puntos de la isla para la práctica del buceo sin bombona de oxígeno, más conocido como snorkel. - Sant Carles de Peralta
La población de Sant Carles de Peralta refleja a la perfección lo que entendemos por un idílico entorno campestre mediterráneo, con sus campos y sus blancas casas salpicando constantemente el paisaje. Aquí también podemos disfrutar de buenos y genuinos restaurantes, como Ca n’Anneta. El arriba mencionado mercadillo de Las Dalias tiene lugar en los alrededores de este pueblo.Calle peatonal en Sant Carles de Peralta. Foto de Andrew Fecheyr
- Iglesia fortificada de Santa Eulària
En Es Puig de Missa, en lo alto de la colina encontramos una iglesia de lo más peculiar: se trata de la capilla de Santa Eulària, la cual ejerció en el pasado la función, no sólo de templo, sino de fortificación defensiva contra ataques de invasores (al igual que ocurría en Dalt Vila). Inaugurada como edificio religioso en el siglo XVI, la de Santa Eulària contaba con cañones de bronce, entre otros elementos defensivos.
Imagen de cabecera: adaptación de una fotografía de Simon Thomas