Alquileres y casas de vacaciones Chelsea

Chelsea Es un barrio fascinante con miles de cosas por descubrir. Su zona más popular es que se encuentra cerca de la elevada High Line, una pasarela donde pasear, con jardines y vistas panorámicas a lo largo de su recorrido de los diferentes estilo arquitectónicos neoyorquinos, que mezclan antiguos complejos industriales con instalaciones modernas. Quienes se alojen en esta zona, podrán disfrutar de maravillosos paseos, especialmente bonitos con la luz del atardecer. Otra zona verde es el famoso parque del río Hudson, ideal para quienes quieran practicar deporte, pues cuenta con complejos deportivos, como los muelles de Chelsea, con muchas posibilidades de ocio. En la parte oeste se pueden encontrar apartamentos con buenas vistas del río Hudson. Quienes quieran estar cerca de todo el meollo de Times Square para no perderse ni un musical deberán alojarse en el norte del barrio y podrán llegar a pie. Cerca del noreste, está el archiconocido Empire State Building.

En el barrio de Chelsea hay dos atracciones que atraen a un gran número de visitantes, tanto autóctonos como turistas: la High Line y el Chelsey Market. La High Line compone un bonito paseo elevado que atraviesa todo el barrio de Chelsea muy cerca del río, con algunas partes en las que se puede disfrutar contemplando la arquitectura y otras en las que el Hudson domina la vista. Al Chelsey Market acuden los visitantes más gourmet, ya que ofrece productos y platos de gran calidad. Hay infinidad de museos y galerías, entre los que destaca el Whitney Museum, con una colección de arte contemporáneo envidiable y unas exposiciones temporales excelentes. En el barrio también hay varias iglesias que se pueden visitar como la del Ángel Guardián, la de San Pedro y la de los Santos Apóstoles. Desde el puerto de Chelsea salen varios barcos desde donde disfrutar la maravillosa vista de la ciudad de Nueva York, en diferentes recorridos interesantísimos.

Los mejores restaurantes de Chelsea tienen los ingredientes adecuados para satisfacer cualquier paladar y para todos los bolsillos. Desde restaurantes exclusivos al aire libre hasta pizzerías con deliciosas porciones por un dólar, Chelsea ofrece todo tipo de cocina, nacional e internacional. La visita al famoso mercado de Chelsea es primero un placer para la vista y, en seguida, para el gusto. Este enorme mercado de alimentos se encuentra en un antiguo complejo industrial de la National Biscuit Company (donde se inventó la galleta Oreo), entre las avenidas 9ª y 15ª. En el barrio se pueden degustar los platos más yanquis, como una buena hamburguesa, y, además, hay mucha comida italiana y asiática. En Chelsea hay también clubes, bares y restaurantes al aire libre, donde se puede disfrutar de una cerveza fría con un aperitivito en uno de su tanto muelles, mientras se admiran las impresionantes vistas del estado de Nueva Jersey al otro lado del río Hudson.

El sistema de transportes de Nueva York es desde luego excepcional, sobre todo en un país como Estados Unidos, donde la mayoría de la gente en pueblos y ciudades se desplaza en coche. El metro de Nueva York lleva funcionando desde el siglo XIX y es uno de los más amplios del mundo, ya que, mientras aún hoy conserva paradas construidas en 1885, sigue expandiendo su territorio. Aunque los taxis de Nueva York sean emblemáticos, los precios son demasiado altos para la mayoría de los bolsillos, con lo que la mejor opción es comprar una tarjeta de transporte, de carácter semanal o mensual, para poder moverse con total libertad por todos los barrios de la ciudad. Tanto el aeropuerto internacional John F. Kennedy como el de la Guardia están a aproximadamente 30 minutos en coche o taxi y a una hora en transporte público. En Chelsea están las paradas de 14th Street-Eighth Avenue, 18th Street, 23rd Street y 28th Street.