Bañada por el mar Mediterráneo nos encontramos con la hermosa isla de Córcega, a 90 kilómetros de la costa italiana, pero perteneciente al territorio francés. De ella enamoran sus playas de arena blanca en las que el sol se refleja sobre un mar de color turquesa, así como sus perfectos pueblecitos blancos de montaña. Sin duda es un destino perfecto de vacaciones tanto para los que buscan relajarse en la playa como para los que quieren algo de turismo un poco más aventurero. Conocida con el apodo de “isla de la belleza”, la época favorita para visitarla es el verano, pero su clima privilegiado puede disfrutarse durante todo el año. ¿Preparado para descubrir Córcega?
Casas en Córcega
Por toda la isla hay hermosos lugares donde poder alojarte. Las zonas más populares para los turistas son las áreas alrededor de Porto Vecchio y Bonifacio, al sur de la isla, y Calvi en el norte. Con Wimdu dispones de una amplia oferta de alquileres de vacaciones de todo tipo, desde acogedores apartamentos para escapadas románticas, hasta amplias casas de veraneo dónde ir con la familia o el grupo de amigos. Sean cuales sean los motivos que te lleven hasta Córcega estamos seguros de que con Wimdu encontrarás el mejor alojamiento para tu estancia. ¡Echa un vistazo!
Curiosidades
- Más del 40% de la superficie de Córcega son reservas naturales.
- El pájaro trepador y la salamandra de Córcega son especies autóctonas y únicas de la isla.
- El personaje más ilustre de Córcega es Napoleón Bonaparte, que nació en Ajaccio en 1769.
- La impresionante ciudad de Bonifacio se dice que es la más hermosa y se halla encima de un acantilado.
Cosas que hacer en Córcega
El paisaje natural de Córcega es digno de contemplar y los amantes de la naturaleza, podrán disfrutar de bonitas excursiones. Hay que elegir cuidadosamente el atuendo, pues el calor abrasador de la costa, puede dejar paso rápidamente a una lluvia brumosa según te aproximes a las montañas. Sin embargo tendrás como recompensa una de las vistas más impresionantes de Europa o incluso un baño en un precioso lago de montaña.
Otra magnífica forma de explorar la isla es desde el mar. Puedes realizar un paseo en yate y descubrir partes que sólo son accesibles desde el mar, como numerosas calas secretas tranquilas y retiradas donde disfrutar de un chapuzón. Haz una excursión a la Reserva Natural de Scandola, declarada patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1983. Si tienes suerte, puede que hasta logres ver una manada de focas tomando el sol y algún que otro delfín junto a tu barco.
El Festival de Jazz de Calvi tiene lugar cada año a mediados de julio y la ciudad se llena de apasionados de la música, que acuden a los conciertos gratuitos que se celebran a lo largo del muelle. Si visitas Calvi no te pierdas explorar sus románticas callejuelas empedradas que conducen hasta la Catedral de Saint Jean-Baptiste, donde contemplar una de las vistas más impresionantes de la bahía, con las montañas como telón de fondo.
Si lo que te apetece son unas vacaciones más activamente acuáticas, Córcega está equipada con las diversiones habituales que pueden encontrarse en otras islas. De modo que podrás practicar toda clase de deportes acuáticos, alquilando desde tablas de windsurf, hasta botes de vela o motos de agua.
Comer y beber en Córcega
Como cabía esperar de una isla situada entre Francia e Italia, la gastronomía es un tema bastante serio en Córcega con gran importancia de los ingredientes frescos. No dejes de dar un paseo por alguno de sus mercados de alimentos, compra un racimo de brócoli, queso de cabra de la zona y acompáñalo con un poco de pan recién hecho. ¡Tendrás el picnic perfecto!
Por sorprendente que sea al estar rodeados de mar, lo cierto es que los habitantes de Córcega nunca se han caracterizado por ser un pueblo pescador, pero eso no significa que no haya numerosos restaurantes donde degustar pescado fresco de la mejor calidad. Por otro lado la montaña ofrece deliciosas recetas elaboradas con los animales más inusuales como el jabalí, el cabrito y el tordo.
La vida nocturna de Córcega es algo más tranquila en comparación con otras islas del Mediterráneo, pero hay algunos clubes nocturnos en Porto Vecchio y Ajaccio que merece la pena visitar. Se trata más bien de una ambiente relajado en plan chillout, que de bailar sin descanso hasta altas horas de la madrugada.
Cómo llegar
Al tratarse de una isla la forma más común de llegar a Córcega es el avión. Cuenta con cuatro aeropuertos en las ciudades de Ajaccio, Bastia, Calvi y Figari, con buenas y frecuentes conexiones desde Francia e Italia. A los que no les importe un trayecto algo más largo y prefieran disfrutar del mar, también es posible llegar mediante ferry desde ambos países. Una vez ya en Córcega, podrás desplazarte fácilmente gracias a los trenes de la compañía francesa SNCF o a los autobuses que prestan servicio por toda la isla. Otra opción muy popular para los más atrevidos es alquilar un motocicleta y recorrer así Córcega.