Alquileres y casas de vacaciones Costas de Armor

Los visitantes llegan a Côtes-d'Armor en busca de preciosas playas y bellísimos escenarios naturales, con alojamientos que pueden ofrecer tranquilidad y diversión. Eso sí, hay que tener en cuenta que la zona es muy popular en temporada alta, por lo que conviene reservar con especial antelación si se planea pasar las vacaciones en Côtes-d'Armor en verano. Se ofrece una amplia gama de alojamientos vacacionales repartidos por todo el departamento. La mayoría de los visitantes eligen alojarse en la costa y disfrutar así de unas maravillosas playas. También hay quienes prefieren quedarse en alguno de los núcleos urbanos, ya que ofrecen todas las ventajas y servicios que solo se encuentran en las ciudades. Los huéspedes que busquen bien tranquilidad absoluta bien realizar distintas rutas de senderismo en plena naturaleza deberán alojarse en las casas y apartamentos situados más al suroeste de la región, ya que de este modo estarán muy cerca del parque natural regional de Armorique.

Acariciada por las aguas del canal de Mancha, Côtes-d'Armor ofrece unos paisajes espectaculares, perfectos tanto para relajarse en alguna de sus variadas playas como para adentrarse en la naturaleza y explorarla a fondo. Desde playas de arena fina entre colinas hasta escarpados acantilados, el pasaje les ofrece a los visitantes vivir una nueva aventura cada día. Por supuesto, se pueden practicar muchos deportes de agua, además de otras actividades, como ciclismo de montaña, parapente o excursiones a caballo. Uno de los paisajes más impresionantes es la costa de Granito Rosa, con enormes rocas rosadas. También se pueden realizar excursiones de un día a algunas de las Siete Islas, con una reserva de aves, o al archipiélago de Bréhat, con una reserva de plantas tropicales. Además, la riqueza patrimonial de la zona es asombrosa, con edificios religiosos, castillos, ciudades medievales, como Moncontour o Dinan, y un largo etcétera. Los más pequeños disfrutarán del parque zoológico de Trégomeur.

Al encontrarse junto al mar, la gastronomía de Côtes-d'Armor tiene como base el marisco y el pescado frescos, con una fuerte presencia en los menús de los restaurantes. La comida de esta región se caracteriza por su simplicidad y, a la vez, sus maravillosos sabores. Entre los platos más típicos destaca el plateau de fruits de mer, una bandeja llena de cangrejos, langostinos, bígaros, gambas, ostras y almejas, servidos sobre una cama de algas y acompañados de pan de centeno, mantequilla y mayonesa. Eso sí, los productos cárnicos también tienen una fuerte presencia. Uno de los platos tradicionales es el cordero presalado, que, aunque sea algo caro, está delicioso. Las crêpes, de fama en todo el mundo, provienen de Bretaña, con lo que es indispensable comerse una (o varias: dulces y saladas). Los dulces también son excelentes y hay productos muy regionales que no hay que dejar de probar, como el kouign-amann (pastel de mantequilla) o el harstum (pastel de mermelada).

Côtes-d'Armor tiene un par de aeropuertos cercanos: el de Lannion - Côte de Granit Rose y el de Saint-Brieuc - Armor, ambos a aproximadamente media hora en coche de la capital, pero dependerá de dónde se encuentre el alojamiento vacacional elegido. En los mismos aeropuertos hay empresas de alquiler de coches, una buena opción para quienes quieran visitar varios puntos de la zona. Además, hay varias estaciones de tren por todo el departamento, con trenes (incluidos los de alta velocidad) provenientes de distintas ciudades francesas. Las paradas en Côtes-d'Armor son Lamballe, Saint-Brieuc, Guingamp y Plouaret-Trégor, con lo que los huéspedes habrán de elegir la más cercana para llegar a su casa o apartamento. Hay dos trenes turísticos que circulan por el departamento: el Vapeur du Trieux y el Chemin de fer des Côtes-du-Nord. Además, la mayoría de los sitios se pueden recorrer fácilmente a pie (algo ideal para disfrutar de los paisajes y de la arquitectura) y siempre hay una buena red de autobuses.